New York Fashion Week: Marc Jacobs

Madonna llega con su novio sobre el último minuto; mientras Lady Gaga llegó demasiado tarde para estar sentada, y mira el desfile de pie con la multitud junto a  los fotógrafos. Pero incluso estos momentos de celebridades que vienen y van, no pueden distraer la atención del público del impresionante teatro en vivo que se desplega sobre la pasarela.

El diseñador  inspirado en el teatro, basó el tema de la colección en la actuación, ya sea Nijinsky y los Ballets Rusos Fonteyn o baile de Tchaikovsky, Sleeping Beauty.

Al igual que las escenas de un cuadro de Degas, sus modelos se subieron al escenario como bailarinas exóticas que acababan de realizar su último pas de deux. Cabelleras atadas con nudos y moños; rostros  pálidos, sólo polvo .

Su ropa llevaba todas las resonancias de su inspiración, el cisne, la muñeca, el Pierrot, el arlequín, el Hada de Azúcar, los bailarines árabes . Jacobs parece transformar con su varita sus modelos y darles el vuelo de fantasía necesario.
Todo brilla alrededor de los cuellos de los modelos,  las joyas, las geishas. Lentejuelas, organzas, tul.
La fantasía de teatro, sin embargo, no podía ocultar del todo la ropa de verdad, la abundancia de las tendencias  que mantiene la alegria.
Lo destacado: el azul marino o marrón, traje de chaqueta a rayas, pantalón corto o traje de volados en los hombros, la camisa blanca institutriz Primaria, los ciclistas, las transparecias de las gasas .Crochet.
Y una ovación de pie para el maestro "Marc Jacobs"